Detalle de uno de los libros de piel de cordero custodiado en el Ayuntamiento de Navarredonda de Gredos por su valor histórico. En él se recogen los privilegios de los carreteros reales.

Detalle de uno de los libros de piel de cordero custodiado en el Ayuntamiento de Navarredonda
de Gredos por su valor histórico. En él se recogen los privilegios de los carreteros reales.

Aunque el origen de este núcleo de población no está muy claro, es probable que los primeros pobladores fueran ganaderos y pastores trashumantes que en el siglo X se empezaron a instalar en esta zona,  atraídos por sus frescos pastos  y el clima estival; desarrollándose así una economía pastoril extensiva, fundamentalmente vacuna y caballar.

Documentadas a finales del siglo XIV, ambas aldeas Navarredonda y Barajas se integran en la tierra de Piedrahita y forman parte, por lo tanto, del señorío de Valdecorneja, ligado hasta el siglo XIX a los sucesivos titulares de la Casa de Alba.

A partir del siglo XV, formaron junto a los concejos de San Martín del Pimpollar, Hoyos de Miguel Muñoz, Hoyos del Espino, Hoyos del Collado, San Martín de la Vega del Alberche, Navadijos y Garganta del Villar, cuyos vecinos venían practicando la trashumancia desde tiempo atrás, la asociación de Carreteros del sexmo de la Sierra de la villa de Piedrahita que funcionó hasta el siglo XIX, integrada en la Mesta Real de Carreteros del Reino.

Aun hoy se mantiene en estas tierras serranas la trashumancia y la ganadería, destacando también Navarredonda de Gredos,  por ser  el centro de la  comarca donde se cría y produce  la  ternera de Ávila (Ternera Avileña-Negra Ibérica) la cual  se puede degustar en todos sus restaurantes, así como en la Tradicional Feria Grande de Ganado de Santiago que se lleva a cabo anualmente en el Teso de la Nava, cada 26 de Julio.